Ayer recibí en mi correo como siempre la entrada del blog Educando a mi hijo http://educandoamihijo.com/el-autismo-en-un-nino-p1998#comments.
Cuenta un poquito la historia de un niño como los nuestros, y en una imagen, este niño tiene un tebeo y esta continuamente pasado las hojas, una y otra vez. al verlo se me puso lo vellos de punta, eso mismo lo hacia Ginés y se tiraba un montón de tiempo, y YO LO HABÍA OLVIDADO.
Ahora me doy cuenta la cantidad de señales que existen para ver que a nuestros niños le pasa algo. Me he puesto a pensar y:
- Yo creo que la primera señal, no la dio el niño con 15 días de vida, Ginés no quería pecho, parecía como si no hubiese leche, pero si, y se ponía a llorar, entonces cambiamos al biberón, me lleve una irritación tremenda.
- No gateo nunca, pero ando dos semanas antes de cumplir un año.
- Cuando se enfadaba, iba corriendo a darse cabezazos con la puerta de la calle, lo malo que a parte de hacerse daño, era de cristal.
- También se daba golpes en la cabeza con los puños, eso lo hace todavía, pero poco.
- Siempre, yo decía que mi niño no me quería, no me buscaba, aunque Ginés siempre fue muy sonriente, y ahora más.
- Quería estar viendo continuamente dibujos, le gustaba repetirlos continuamente, bueno eso le sigue gustando.
- Hoy nos hemos dado cuenta el tema de los ruido, como le afecta a lo niños. Hablándolo con mi marido, se ha recordado una vez que lo llevo al fútbol, tenia unos cuatros años, se lo paso casi todo el partido llorando y chillando. Con el tremendo ruido que hubo allí, y nosotros pensando mal y no nos dimos cuenta hasta hoy, que era por el ruido
- Cuando le llamábamos, nunca miraba a la primera, si no a la quinta o la sexta.
- De comer de todo, pero de todo, lo reduzco a pocas cosas, patata, nugget, yogurt, sopa pasada, pan, pizza, no más, Menos mal que se puede decir que ya come casi de todo., pero a costado.
- Le gustaba y le gusta poner los coches, trenes, etc en linea. Ahora mismo recuerdo que cogía una cuerda, y le sacaba la linea, y se ponía a mirarla desde el borde, se podía tirar mucho rato.
- Tenia un apego obsesivo a su sabanita, ahora sigue, pero controlable.
- Problema para el control de esfínteres. Que me costo que hiciese pipí en el water.
- Obsesión total hacia los trenes, él dice que de mayor quiere ser conductor de trenes.
- Sabía decir algunas palabritas, pues las perdió todas alrededor de los 2 años, no volvió a decir de nuevo su primera palabra hasta los tres años y medios, un mes después de empezar la estimulación temprana.
Ahora mismo no recuerdo más, pero seguro que había más señales. Que pena que se nos olviden las cosas, si fuesen solo las malas, pues no me importaban, pero es que son también las buenas.